El clásico de Racing con Boca fue una ratificación más de que Agustín García Basso se mueve en su mejor versión, la recuperada desde hace tiempo con una producción destacada como la le permitió ganarse la titularidad en 2024: la llegada de Marcos Rojo lo relegó algunos partidos al banco, pe´ro la lesión del ex Boca le abrió una nueva puerta y el General no lo desaprovechó con la demostración de solidez, criterio con la pelota y firmeza en el uno contra uno, todos atributos exhibidos en la Bombonera, en el triunfo por 1-0 con gol de Maravilla Martínez para meterse en la final del Torneo Clausura.
Después del gran triunfo, instantes antes de que sus compañeros armaran un trencito de la alegría con música y mientras cantaban a la salida del vestuario, el defensor hizo su análisis del clásico. "En el primer tiempo no conectamos tan ben, pero sabíamos que teníamos ue estar bien parados, ganar duelos. Por momentos pudimos en la salida con línea de tres en otros no. En el segundo tuvimos mejor trato de balón y eso nos permitió crecer minuto a minuto para poder llegar a ese gol", aseguró el zaguero.
Y puntualizó la mejora: "En el segundo tiempo estuvimos mejor parados, con mucha más tranquilidad, entendiendo más el campo de juego. Y eso nos llevó a estar bien. Y en base a eso, poder crecer y conseguir ese gol que nos dio el pase a la final".
Otra vez, en una instancia mata-mata, la Academia dio la talla con carácter, coraje y sabiduría para jugar este tipo de partidos, con el corazón enorme como bandera más allá de sus vaivenes en el juego. "Gustavo (Costas) maneja el timón y nos inculca eso, es fanático de Racing y encima es técnico. Siempre nos presiona -contó-, nos pincha, nos dice que tenemos que competir, llegar hasta la final. En algunas competencias no lo logramos y en tras sí. Estamos muy felices de dejar a Racing en una nueva final, algo que para nosotros significa mucho. Pero con la tranquilidad que eso conlleva porque todavía no conseguimos nada".
Racing es hoy considerado el mejor equipo el fútbol argentino y asoma como el máximo candidato a quedarse con la gloria. Pero García Basso prefiere se cauto y esperar el final de la historia. "Cada equipo tiene su manera. El anterior campeón fue Platense, que lo hizo muy bien. Nos ganó a nosotros, a River, a San Lorenzo y a Huracán. Con sus herramientas fueron los mejores. Nosotros vamos por buen camino, pero no ganamos nada. Hay que respetar, ir con la serenidad que corresponde", advirtió.
También se refirió a la ausencia de Santiago Sosa, producto de que cumplió una fecha de suspensión por haber sido expulsado (por doble amarilla) en los cuartos de final ante Tigre: "Si te ponés a ver el proceso de Gustavo, Sant se ha perdido muy pocos partidos. Es un jugador muy importante porque tiene esa variante de que te puede jugar de líbero o de cinco. Está en varios lados, contagia mucho. Y tiene un juego aéreo increíble. Perdimos un pilar importante, peor destaco mucho al grupo. Toque a quien le toque, siempre responde. Así que agradecidos, felices. Ahora seguramente podrá estar para la final".
Qué dijo sobre la sensación de usar la cinta de capitán
El General jugó un partido que tuvo un condimento extra para él colocado sobre su brazo izquierdo: el brazalete.
"Fue muy importante para mí llevar la cinta de capitán, la usaron muchos jugadores importantes, siempre con el respeto que corresponde, tatar de estar a la altura y de representar a mis compañeros adentro y fuera del campo. Estoy feliz y agradecido de esta oportunidad, pero sabemos que están Zucu, Santi (Sosa), Gabi Arias, los capitanes. La llevaron también Gabi Rojas, Zaracho... Hay buenos jugadores, de mucha historia y jerarquía. Más lindo fue usa la cinta coronando con esta victoria", cerró el defensor que, junto a Nazareno Colombo y Marco Di Cesare controló los intentos de Miguel Merentiel y Milton Giménez, el doble 9 de Boca.,
