Racing sabe que necesita los seis puntos que quedan por jugarse en la fase regular. Todos lo tienen claro. Es urgente para meterse entre los ocho mejores de su zona y poder pasar a los Play-Off y también para aspirar a subir alguna posición en la tabla anual pensando en la clasificación a las Copas Internacionales. Hoy está en zona de Copa Sudamericana, pero no tiene asegurada esa competencia y además pretende acercarse a la zona de Copa Libertadores.
Pero en los últimos partidos el equipo de Gustavo Costas viene atravesando un problema. Un claro déficit que influye de manera directa en esta a lucha por los dos objetivos: pelear hasta el final el Torneo Clausura y la clasificación a la máxima competencia continental en 2026. Como mencionamos, para soñar con las dos cosas es necesario sacar los seis puntos que quedan en el camino. Y para eso, es obligatorio ganar. Está claro que para sumar de a tres, hay que hacer goles. Esto es lo que le está costando al equipo.
Con Maravilla Martínez en un momento de sequía, algo a lo que no estábamos acostumbrados, no hay quien convierta. El nueve lleva varios partidos sin meterla y además no pudo estar en la última presentación ante Central Córdoba. Ahora todo indica que volverá este sábado contra Defensa y Justicia, sin dudas una gran noticia por lo clave que es. Pero también es necesario que vuelva el gol. En sus pies o en el de cualquiera de sus compañeros. Racing lleva tres partidos en fila sin poder hacer un gol.
La racha negativa de Racing
Como mencionamos, el equipo de Gustavo Costas arrastra tres partidos de manera consecutiva sin poder festejar. Esto es contando todo tipo de competencias. No anotó en ninguno de los dos partidos contra Flamengo por la semifinal de Copa Libertadores y tampoco lo pudo hacer en la fecha pasada contra Central Córdoba. Por eso, lógico, no ganó ninguno de esos partidos. Su último tanto fue ante Aldosivi en el Cilindro, en la previa de la serie copera. El gol lo hizo Luciano Vietto de penal, con una picadita exquisita. Pero al ser por esa vía marca lo mucho que le esta costando la generación, además de meterla.
De hecho, si nos vamos mas atrás, en los últimos ocho partidos disputados sólo pudo marcar en dos. El mencionado ante Aldosivi y el triunfo contra Banfield por 3-1. Ese día volvió a marcar tres goles en un mismo partido después de mucho tiempo. Pero lo alarmante es que Racing en seis de esos ocho encuentros no logró anotar y se quedó con el grito atragantado. Un claro déficit que va más allá de un buen o mal momento.
Está claro que a Racing le está costando mucho la parte ofensiva. La falta de jerarquía arriba, ya que si Maravilla no está bien no hay nadie que lo acompañe, queda en evidencia con los números. Sabe Costas que este es un problema porque al fútbol de gana con goles. Y si hay algo que lo sostuvo este último tiempo fue lo defensivo. Mejoró en ese aspecto, pero ahora falta la parte de ataque, de marcar la diferencia arriba. Eso va por dos vías, la mencionada jerarquía y también un funcionamiento que permita que el equipo genere.
En este punto se está claramente en deuda y por eso se depende mucho de alguna individualidad más que de jugadas de equipo. Un déficit que quizá antes se suplía con jerarquía y un Maravilla Martínez que todo lo que tenía lo metía adentro del arco. Ahora se le cerró el arco y no hay nadie que lo acompañe ni una idea que lo ayude.
Fotos: Prensa Racing.
desde q se fue judas salas a maravilla le cuesta hacer goles,solari,duvan,conechy no le dan una servida como le daba el traidor a maravila,todo culpa d "salto de calidad,la inversion no es un gasto" milito,ex idolo nuestro inepto presidente