Sin dudas, el tema de la semana en Racing fue quién iba a acompañar a Sigali en la zaga central en reemplazo para el suspendido Orban y el lesionado Donatti. Los nombres eran dos: Mena (con Alexis Soto de 3) o el ingreso de Nery Domínguez. Finalmente, y ante varias pruebas, el DT eligió a este último como titular, jugador que conoce bien, que es de su confianza y que desde un principio era la opción más lógica.
Mediocampista central por naturaleza, desde el comienzo del partido, el jugador de 28 años supo adaptarse a la posición de primer marcador central (por perfil, el Chacho lo puso para que cierre hacia su pierna más hábil) y respondió con solvencia en un puesto complicado y ante un rival difícil. Ramón Ábila, potente y pesado en sus movimientos, lo buscó siempre por su falta de experiencia, pero Domínguez le ganó la mayoría de los duelos con rapidez para anticipar en los cruces y también en la lucha cuerpo a cuerpo para ganar de cabeza. De hecho, no tuvo ningún tipo de responsabilidad en el gol de Wanchope.
Lamentablemente, el partido dejó a todo el mundo Racing con un sabor agridulce, pero debe destacarse el desempeño de este jugador que solamente había jugado en esa posición en 5ta y 4ta categoría de inferiores en Rosario Central, además de algún partido que por circunstancias excepcionales lo haya requerido. Nery Domínguez cumplió con lo pedido por Coudet e hizo que las dudas de los hinchas durante la semana quedaran a un lado. Bien por los dos.
Chacho quiso despistar
Por lo observado en las prácticas, Coudet parecía inclinarse por el chileno Mena y hacer ingresar a Alexis Soto de lateral. De hecho, en este portal contamos que en la conferencia de prensa del jueves aseguró que “aunque todavía queden algunos días, lo más probable es que jueguen Mena y Soto”.
Tal vez para despistar al rival, el Chacho se guardó la carta hasta último momento y confirmó el equipo una hora antes del partido, con Nery de titular.
